CaixaBank respalda con un millón de euros iniciativas encaminadas a la mejora del patrimonio natural, a través de la protección de la biodiversidad, la innovación ambiental, la economía circular y la lucha contra la despoblación, en todo el país. Entre los 78 proyectos que esta entidad ha seleccionado, se encuentra el de la ADR La Rioja Suroriental, que será apoyado también por Fundación Caja Rioja, junto a la cual Caixabank ha lanzado esta convocatoria en nuestra región. Así, la creación y reproducción de un guardaviñas como seña de identidad del paisaje riojano y de la cultura del vino como elemento de sensibilización para la conservación del paisaje, centra este proyecto que incluirá diversas vías de difusión y divulgación.
En nuestra comunidad autónoma, esta convocatoria beneficiará también a las iniciativas de la Asociación para el Desarrollo de La Rioja Alta (ADRA) y la Fundación Oxígeno. A las convocatorias medioambientales de CaixaBank han podido presentarse entidades privadas, sin ánimo de lucro y con una antigüedad mínima de tres años, cuya actividad esté relacionada con la protección de la naturaleza y el medioambiente o el desarrollo rural.
Los proyectos presentados y seleccionados se enmarcan dentro de diferentes tipologías, como la biodiversidad (conservación y uso sostenible de los ecosistemas), la economía circular (reducción y reciclaje de residuos, especialmente plásticos), la innovación ambiental (tecnologías útiles para reducir o evitar el daño ambiental), así como el reto demográfico vinculado al impacto ambiental.
El compromiso social de CaixaBank es también un compromiso con el medioambiente y con la transición a una economía baja en carbono. La entidad gestiona su actividad diaria en el marco de este compromiso, respetando el entorno y las personas, y destina una parte del presupuesto a desarrollar estrategias climáticas a largo plazo.
Asimismo, desde la Fundación Caja Rioja, consideran esencial luchar desde nuestro territorio para intentar combatir los dos grandes males que afectan al planeta: el cambio climático y la pérdida de biodiversidad, ya que nuestra región, debido a su tamaño y características geográficas, es ideal para la implantación de proyectos que contribuyan a la conservación del medioambiente y del paisaje.